¿Te has preguntado alguna vez por qué las empresas simulan de forma intencionada ciberataques contra sus propios sistemas, redes o aplicaciones? Se trata de ir un paso por delante de los hackers. Las pruebas de penetración, o simplemente pentesting, son el proceso de realizar pruebas rigurosas en la infraestructura de TI de una empresa para identificar vulnerabilidades antes de que puedan ser explotadas por los ciberdelincuentes. Vamos a explicártelo bien.
Índice:
Como es obvio por las primeras líneas, hoy vamos a entrar en el meollo de las pruebas de penetración. ¿Por qué es importante documentar estas pruebas? ¿Qué tipos de pruebas de penetración (pentests) existen? ¿Cuáles son las ventajas de todo esto? Obtén respuesta a estas y otras preguntas en este artículo.
¿Cómo es una prueba de penetración?
Como ya hemos mencionado brevemente, las pruebas de penetración consisten en que una empresa intenta intencionadamente hackear sus propios sistemas, redes y servicios informáticos para ver si aguantan o si existen vulnerabilidades que podrían permitir un acceso no autorizado. Pero, ¿cómo es en realidad?
Una prueba de penetración se suele desarrollar en varias etapas. Comienza con la planificación, en la que la empresa define el alcance de los sistemas, plataformas y dispositivos que se probarán. A continuación, comienza la fase de reconocimiento, en la que el probador recopila toda la información posible sobre los sistemas en cuestión, como su arquitectura informática y los posibles puntos de entrada. Esto también incluye la exploración de vulnerabilidades, utilizando herramientas automatizadas para buscar puntos débiles en las defensas de ciberseguridad.
Una vez hecho esto, comienza la fase de explotación, en la que los probadores utilizan sus herramientas y conocimientos para intentar penetrar. Por último, está la fase de revisión, en la que todos los implicados examinan detenidamente el funcionamiento de los sistemas y analizan cualquier problema del entorno de TI de la empresa que pueda requerir atención.
¿Por qué son importantes las pruebas de penetración?
El cambio es la única constante del mundo digital. Las actualizaciones de software, el desarrollo de infraestructuras y la evolución de las ciberamenazas hacen que el panorama digital sea, cuando menos, dinámico. A medida que la tecnología avanza, surgen nuevas vulnerabilidades, por lo que realizar pruebas de penetración con regularidad es muy importante.
Al evaluar una y otra vez las defensas, las organizaciones pueden asegurarse de que se mantienen fuertes frente a las amenazas existentes, pero también (y esto es aún más importante) frente a las emergentes. Es más, a medida que las empresas crecen, amplían su infraestructura y adoptan más soluciones de red, por lo que la superficie de ataque potencial crece. Gracias a las pruebas de penetración periódicas, las empresas se aseguran de que sus defensas evolucionan al mismo ritmo que su negocio.
Hoy en día, no es arriesgado asumir que la ciberdelincuencia es el delito más lucrativo. De hecho, se prevé que se siga refinando y que aumente su frecuencia. Por ello, las pruebas de penetración deberían ser una parte integral de los procesos de las organizaciones.
Ventajas de las pruebas de penetración
Las pruebas de penetración ofrecen una serie de ventajas que van más allá de la identificación de vulnerabilidades:
Defensa proactiva: La naturaleza proactiva del pentesting es una de sus principales ventajas. En vez de adoptar estrategias reactivas y esperar a que se produzca el ciberataque, son las organizaciones las que buscan posibles vulnerabilidades. Con este enfoque, se aseguran de identificar y mitigar las amenazas potenciales antes de que los ciberdelincuentes las exploten.
Toma de decisiones informada: Gracias a la información obtenida de las pruebas de penetración, las organizaciones pueden tomar decisiones basadas en datos con respecto a su estrategia de seguridad. Tanto si se trata de destinar recursos a áreas específicas como de priorizar la corrección de vulnerabilidades o invertir en herramientas de seguridad, las pruebas de penetración siempre proporcionan la transparencia necesaria para una toma de decisiones eficaz.
Cumplimiento de la normativa: En muchos sectores, se exige una conformidad normativa. Gracias a las pruebas de penetración, las organizaciones pueden cumplir las normativas específicas del sector de forma más fácil y eficaz, lo que acaba evitándoles posibles problemas legales o multas elevadas.
Mejora de la reputación: Las filtraciones de datos y los ciberataques pueden perjudicar gravemente la reputación de una organización. En algunos casos, pueden incluso llevar a una empresa a la quiebra. Al realizar pruebas de penetración con regularidad y mostrar su compromiso con la ciberseguridad, las organizaciones pueden mejorar su reputación e inspirar confianza a clientes, socios y otras partes interesadas.
Ahorro de costes: Aunque las pruebas de penetración conllevan un coste inicial, el ahorro a largo plazo puede ser significativo, sobre todo teniendo en cuenta las multas a las que habría que hacer frente en caso de filtración de datos. Si se identifican y solucionan las vulnerabilidades a tiempo, se pueden evitar posibles pérdidas financieras y de reputación asociadas a las filtraciones de datos.
Tipos de pruebas de penetración
El mundo digital es muy vasto, y el panorama de las vulnerabilidades potenciales no iba a ser menos. Los distintos activos y situaciones requieren tipos diferentes de pruebas de penetración.
Pruebas de penetración de la red: Este tipo de prueba podría entenderse como una inmersión en la infraestructura de red de una organización. Se evalúa la solidez de los servidores, cortafuegos, routers y otros dispositivos de red frente a posibles ataques. El objetivo de una prueba de penetración de la red es garantizar que los datos en tránsito están seguros en todo momento.
Pruebas de penetración de aplicaciones web: A los ciberdelincuentes les encanta atacar aplicaciones web, ya que son fácilmente accesibles a través de Internet. En el pentesting de aplicaciones web se hurga en los entresijos de las mismas, desde la interfaz de usuario del frontend hasta las bases de datos del backend. Así, se analizan todos los aspectos de la aplicación web y se detectan las posibles vulnerabilidades.
Pruebas de penetración de aplicaciones móviles: La popularidad de los dispositivos móviles ha propiciado un gran auge de las aplicaciones móviles. Estas pruebas se centran tanto en la aplicación como en la plataforma móvil subyacente, de manera que se garantiza que los datos de los usuarios estén a salvo.
Pruebas de penetración físicas: Aunque se suelen pasar por alto, estas pruebas evalúan las medidas de seguridad físicas adoptadas por una organización. Se simulan intentos de acceso a las instalaciones sin autorización, con el objetivo de identificar posibles fallos de seguridad en cuestiones como la vigilancia, los controles de acceso y la importancia que los empleados le dan a la seguridad.
Métodos de las pruebas de penetración
Las distintas formas de realizar pentesting nos ofrecen perspectivas únicas adaptadas a varias situaciones:
Pruebas externas: Este método consiste en comprobar la seguridad de aquellos activos de la organización que son visibles en Internet y que, por tanto, podrían ser explotados. Se trata de una rigurosa evaluación de las aplicaciones, sitios web y servidores que ve el público, lo que proporciona información sobre posibles vulnerabilidades a las que los atacantes externos podrían intentar sacar partido.
Pruebas internas: No todas las amenazas son externas. De hecho, los resultados del informe Gurucul's 2023 Insider Threat indican que las amenazas internas son una de las principales preocupaciones en organizaciones de todo tipo. Por ello, simular amenazas internas es muy importante para valorar los riesgos que entrañan las amenazas potenciales procedentes de la propia organización, ya sea por un empleado descontento o por un proveedor externo con malas intenciones.
Pruebas a ciegas: Durante una prueba a ciegas, los probadores saben muy poco sobre el objetivo. Es una simulación propia del mundo real, en la que se imitan situaciones en que los ciberdelincuentes utilizan diversas técnicas para recabar información y lanzar ataques. Es una forma estupenda de entender cómo funcionan los ciberataques en tiempo real.
Pruebas de doble ciego: En este caso, se lleva el realismo un paso más allá, pues durante una prueba de doble ciego ni siquiera los equipos informáticos y de seguridad de la organización saben que se va a llevar a cabo. Con este enfoque, se evalúa la capacidad de respuesta de la organización en tiempo real, y se obtiene información sobre su eficacia a la hora de detectar incidentes y afrontarlos.
Pruebas selectivas: Se trata de un método de colaboración en el que tanto la organización como el probador están al tanto de la prueba. Es un enfoque transparente, que suele usarse con fines educativos para ofrecer una visión general del estado de la seguridad y formar a los equipos internos.
Las cinco fases de las pruebas de penetración
En la mayoría de los casos, el pentesting consta de cinco fases. Estas son las cinco fases más típicas.
Reconocimiento: Es la fase inicial durante la que el experto en pruebas de penetración recopila datos sobre el objetivo. Dicha información puede incluir direcciones IP, nombres de dominio, infraestructura de red e incluso datos de los empleados. El objetivo es recopilar datos que puedan utilizarse para encontrar vulnerabilidades reales. Esta fase puede incluir tanto métodos pasivos (estudiar la información disponible públicamente) como métodos activos (interactuar directamente con el sistema objetivo).
Escaneo: El siguiente paso tras la recopilación de información es identificar los posibles puntos de entrada. Esto supone escanear el sistema de diversas formas para identificar puertos que podrían estar abiertos, servicios en ejecución y aplicaciones, junto con sus versiones. El objetivo es determinar cómo responde el objetivo a varios intentos de intrusión, lo que puede facilitar la planificación del ataque real.
Análisis de vulnerabilidades: Ahora que ya tiene una imagen clara de la infraestructura del objetivo, el probador empieza a buscar puntos débiles. Esta fase suele conllevar el uso de herramientas automatizadas, bases de datos y técnicas manuales para identificar vulnerabilidades en el sistema. Así, se obtiene una lista de posibles puntos débiles que podrían explotarse en la siguiente fase.
Explotación: Durante esta fase, el probador intenta explotar las vulnerabilidades que ha identificado. El objetivo no es solo penetrar en el sistema, sino también comprender la posibles consecuencias de cada vulnerabilidad. Por ejemplo, ¿podría utilizarse esa vulnerabilidad para obtener acceso no autorizado, gestionar privilegios de acceso o acceder a datos sensibles? Gracias a esta fase, se obtiene una imagen bastante clara de lo que podría conseguir un atacante en una situación real.
Conclusiones: Tras la evaluación, el probador elabora un informe detallado. Suele incluir un resumen de la evaluación, las vulnerabilidades detectadas, los datos a los que se ha accedido y algunas recomendaciones para proteger el sistema. El objetivo es proporcionar a la organización consejos prácticos que puedan aplicarse para reforzar su postura de seguridad en términos generales. Esta fase es crucial no solo porque señala los puntos débiles, sino porque además orienta a la organización acerca de los pasos que debe seguir para mejorar su postura de seguridad.
Herramientas para las pruebas de penetración
Existen montones de herramientas para realizar pruebas de penetración, pero no hay ninguna que lo haga todo. Las mejores suelen centrarse en áreas específicas, como romper las defensas de la red o descifrar contraseñas. Por lo tanto, para realizar una prueba de penetración con éxito, tendrás que utilizar una combinación de herramientas. Estas son algunas de las opciones más comunes:
Escáner de vulnerabilidades: Comprueba si existen vulnerabilidades o errores de configuración conocidos en tus sistemas para que puedas identificar posibles brechas de seguridad antes de que los atacantes puedan explotarlas.
Proxy web: Es una herramienta imprescindible para probar aplicaciones web que te ayuda a identificar vulnerabilidades ocultas como entradas inseguras o autenticación defectuosa.
Sniffer de red: Supervisa y analiza el tráfico que fluye por tu red para detectar datos sin cifrar, actividades sospechosas o protocolos débiles que los atacantes podrían aprovechar.
Escáner de puertos: Busca puertos abiertos en un sistema para encontrar posibles puntos de entrada para los atacantes.
Descifrador de contraseñas: Intenta descifrar contraseñas mediante ataques de fuerza bruta o de diccionario para que pueda detectar credenciales débiles en tu sistema.
En resumen
En el mundo digital, las pruebas de penetración deben ser una parte esencial de los procesos de las organizaciones, sobre todo si la empresa aspira al éxito. Es importante señalar que las pruebas de penetración no se limitan a identificar vulnerabilidades. De hecho, la idea es comprender las implicaciones más amplias que dichas vulnerabilidades podrían tener en la postura de seguridad de una organización. Mediante la simulación de ciberataques, las empresas obtienen información valiosa sobre sus defensas, lo que les permite tomar decisiones informadas acerca de cómo reforzar sus medidas de seguridad.
Sin embargo, y aunque las pruebas de penetración proporcionen una visión detallada de las vulnerabilidades de una organización, es esencial no pasar por alto los aspectos básicos. Las contraseñas, por ejemplo, suelen ser la primera línea de defensa de la mayoría de sistemas digitales. No se puede exagerar su importancia y, sin embargo, siguen siendo uno de los vectores más utilizados para los ciberataques.
Aquí es donde NordPass para empresas resulta útil. Y es que ofrece algo más que un entorno seguro para almacenar contraseñas. Proporciona un entorno cifrado, lo que garantiza que las credenciales sensibles estarán protegidas de miradas indiscretas. Gracias a funciones como el generador de contraseñas, los usuarios pueden crear contraseñas fuertes y difíciles de descifrar; por otro lado, la comprobación del estado de las contraseñas proporciona información sobre la solidez de las contraseñas almacenadas. Además, con el escáner de filtración de datos, las organizaciones pueden adelantarse a las posibles amenazas, ya que recibirán alertas si sus dominios o correos electrónicos han sido detectados en una filtración.
Al final y al cabo, la lección más importante que se puede extraer de este artículo es que, cuando se trata de la seguridad de las organizaciones, no existe una solución única para todos. Aunque las pruebas de penetración son cruciales y proporcionan información muy valiosa, no se pueden pasar por alto las herramientas de seguridad fundamentales, como NordPass.